Tecmerin. Revista de Ensayos Audiovisuales
Nº 5 – 2020 (2)
Marketing de Raza, Género y Activismo a través de Entidades Incorpóreas: Una Mirada a los ‘Robots’ de Instagram de Brud
Nicole Ucedo (UCLA)
Cómo citar este artículo: Ucedo, N. (2020) Marketing de Raza, Género y Activismo a través de Entidades Incorpóreas: Una Mirada a los ‘Robots’ de Instagram de Brud / Marketing Race, Gender, and Activism through Bodiless Entities: A look at Brud’s Instagram ‘Robots’. Tecmerin. Revista de Ensayos Audiovisuales, 5(2). ISSN: 2659-4269
Cuando vi por primera vez a lilmiquela en Instagram, no sabía qué era lo que sucedía. Todo en la apariencia de Miquela parecía familiar: su cara, su pelo, su cuerpo—hasta su mirada con conciencia cuando la cámara toma su foto—pero, al mismo tiempo, todo parecía un poco raro. Después de investigar obsesivamente todas sus publicaciones en Instagram y de buscar en Google, descubrí que lilmiquela es simplemente un personaje digital con una cuenta de Instagram, o un ‘robot’ de Instagram, como ‘ella’ se describe a sí misma. Miquela fue diseñada por Brud, una compañía de diseño tecnológico de Los Ángeles, creada por Sara Decou y Trevor McFedries que ha generado múltiples personalidades en Instagram para comercializar productos y apoyar ideas. Aunque el concepto de diseñar un animal o un personaje para vender un producto no es nuevo, lo que no está claro cuando uno ve a Miquela y sus amigxs robots Blawko22 y BermudaisBae (los tres son influencers en redes sociales), es si es posible que entidades digitales encarnen raza, genero e ideologías o si sólo están actuando, desempeñando tales papeles. Aunque los humanos pueden también actuar sus identidades, la intención en la formación de las identidades de los ‘robots’ de Brud es muy distinta. De acuerdo con el Cyborg Manifesto de Donna Haraway. que explica que la raza, género y clase como ideas impuestas sobre nosotros por los poderes capitalistas y colonialistas (Haraway, 2018), este ensayo audiovisual apunta que el género, la raza y el activismo político de los ‘robots’ de Brud sólo existen dentro de un marco de marketing en donde sus identidades sirven para dirigir a un público específico hacia ciertos productos.
Este vídeo ensayo está dividido en tres secciones: Epidermis Digital, #Activismo y Género y Sexualidad. Epidermis Digital analiza cómo el color de la piel juega un papel en la racialización de los ‘robots’ de Brud, específicamente Miquela, la más famosa de los tres y a la que a menudo se define como “racialmente ambigua.” Algunos medios dicen que Miquela es estadounidense y brasileña, mientras otros insisten en que ella es una mezcla de brasileña, española y estadounidense. Como el cuerpo de Miquela está formado de varios pixeles creados por una computadora de Los Ángeles, la discusión acerca de su nacionalidad y ascendencia parece ser obsoleta—pero, por otro lado, es una parte importante de su narrativa, utilizada para atraer seguidores en las redes sociales. Su ascendencia internacional parece haber sido creada en un intento de explicar su ambigüedad racial; pero las naciones no poseen una raza específica, así que su mezcla racial sigue sin tener explicación. Race and/as Technology, de Wendy Hui Kyong Chun, dice que la raza va mas allá de construcciones culturales y biológicas. Chun escribe sobre la visibilidad de raza, “race is on the skin, but skin is the sign of something deeper, something hidden in the invisible interior of the organism (as organic or ontological)” (Chun, 2009). Este concepto de Chun—que la piel puede significar raza—es aplicable a Miquela ya que, deliberadamente, parece mestiza. Pero la piel es sólo el nivel superficial; la visibilidad de la raza en la piel no conlleva un significado específico ni la historia de sus raíces.
#Activismo analiza cómo los robots de Brud expresan sus puntos de vista políticos y sociales en línea, y qué obtienen Brud y las marcas que los emplean. Miquela no esconde ser un ‘robot’, de hecho Miquela, Bermuda y Blawko se expresan explícitamente en relación a sus propias existencias digitales. Sin embargo, sus identidades no-humanas se definen por sus opiniones y puntos de vista sobre el mundo humano que, por lo tanto, trabaja para humanizarlos. Miquela usa su plataforma para apoyar a la comunidad LGBTQ+, “Black Lives Matter”, y el derecho al aborto seguro y gratuito. Estos temas, en los que ella se siente muy comprometida, ayudan a crear su identidad como una mujer de color. The Mulatto Cyborg, de Leilani Nishime, relaciona los cyborgs con la raza mestiza ya que ambos participan de una confusión y preocupación orientada al cuerpo (Nishime, 2005). Se puede ver a Miquela como cyborg y raza mixta investigando la forma de su “cuerpo” a través de su presentación física, que a menudo es experimental en lo que a la moda se refiere, y sus publicaciones de Instagram que cuestionan directamente su identidad.
Finalmente, en Género y Sexualidad yo sostengo que los ‘robots’ de Brud son sexualizados en lo que respecta al uso de marcas y narrativas en las redes sociales para ser vendidos a consumidores. Miquela está retratada como queer en la campaña de Calvin Klein con Bella Hadid en donde se besan. Esta campaña provocó indignación en comunidades de internet por la táctica de queerbaiting implementada por Calvin Klein. De un modo parecido, la relación heterosexual entre Blawko y Bermuda y su indumentaria normativamente cis, funciona para atraer a un mayor número de seguidores a medida que los usuarios en línea se involucran en el drama romántico entre las dos entidades digitales. En el texto de Judith/Jack Halberstam, Automating Gender, el/ella dice, “Gender we might argue like computer intelligence, is a learned, imitative behavior that can be processed so well that it comes to look natural” (Halberstam, 1991) En definitiva, eso es para lo que están diseñados estos ‘robots’: representar sus géneros aprendidos e infiltrarse en nuestra sociedad cyber-humana para parecerse a nosotros y vendernos los productos que avalan.
La capacidad de las representaciones digitales, o incluso de la inteligencia artificial, para ser racializadas, sexualizadas y politizadas sigue sin estar clara. Los ‘robots’ de Brud muestran que sus identidades sólo existen dentro de un marco capitalista. Sin el propósito mercadotécnico, estos ‘robots’ no podrían actuar sus géneros, razas o ideologías, y, así, perderían sus identidades.
Bibliografia
- Chun, Wendy Hui Kyong (2009) “Introduction: Race and/as Technology; or, How to Do Things to Race” Camera Obscura: Feminism, Culture, and Media Studies, 24(1), 7-35.
- Halberstam, Judith (1991) “Automating Gender: Postmodern Feminism in the Age of the Intelligent Machine,” Feminist Studies, 17(3), 439.
- Haraway, Donna Jeanne (2018) Cyborg Manifesto. Victoria, British Columbia: Camas Books.
- Nishime, Leilani (2005) “The Mulatto Cyborg: Imagining a Multiracial Future,” Cinema Journal, 44(2), 34-49.
Tecmerin. Revista de Ensayos Audiovisuales
ISSN: 2659-4269
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